Cómo limpiar una bombilla ahorradora rota y dónde depositarla.
Las bombillas ahorradoras de energía (conocidas también como CFL por sus siglas en inglés: Compact Fluorescent Lamp) contienen pequeñas cantidades de vapor de mercurio y por eso es conveniente hacer un adecuado tratamiento una vez finaliza su vida útil o si se produce alguna rotura del producto. Además, el plástico, el vidrio y los metales contenidos en una bombilla pueden reciclarse y reutilizarse en nuevas aplicaciones.
Los pasos más importantes para reducir la exposición al vapor de mercurio de una bombilla rota son:
Antes de la recogida de la bombilla rota.
- Debe retirar de la habitación las mascotas.
- Ventile la habitación 5-10 minutos abriendo ventanas o puertas.
- Apague el sistema ventilación y aire acondicionado, si dispone de uno.
- Reúna los materiales necesarios para recoger la bombilla rota (preferentemente escoba y una bolsa para depositar los restos).
Durante la recogida.
- Sea minucioso al recoger el cristal roto y el polvo visible. Hágalo de manera manual (barriendo) y no utilice aspirador.
- Coloque los restos de la bombilla en una bolsa cerrada (bolsa plástica).
Después de la recogida.
- Debemos llevarlas a ferreterías, tiendas de iluminación ó supermercados adheridos a Ambilamp, ya que disponen de un pequeño contenedor para ofrecer a sus clientes un servicio adicional de recogida de residuos.
- Para más información os ofrecemos el contacto de Ambilamp: 900.102.340 o http://www.ambilamp.es/recogida/puntos_de_recogida
Además de las bombillas ahorradoras de energía, también debemos incluir en este proceso los tubos fluorescentes, bombillas de descarga y bombillas y tiras LED.